La idea de este proyecto surge como consecuencia de la trayectoria de colaboración e intereses comunes previos entre varios grupos de investigación e instituciones públicas.
Por una parte, el Grupo de Biología Vegetal Aplicada de la Universidad de La Laguna (ULL) y el Grupo de Activadores Químicos de las Defensas de la Planta del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología del CSIC (IPNA-CSIC), tras una larga trayectoria de colaboración conjunta en una línea común de búsqueda de moléculas bioactivas con capacidad de aumentar la resistencia/tolerancia al estrés, y por otra, el Grupo ISOPlexis/Germobanco de la Universidad de Madeira (UMa) en su búsqueda de variedades vegetales más resistentes al estrés hídrico.
Por otro lado, el interés por parte del Cabildo de Tenerife en promocionar nuevas tecnologías para el sector primario y por último el interés de las empresas que forman parte del consorcio (Biovert S.L. y Kweek Agro S.L.) que ya han licenciado unas tecnologías similares y están interesadas en nuevos productos.